Algunos tratamientos superficiales se realizan para mejorar la extracción de la suela del molde, reduciendo la fricción y alargando la vida útil de los moldes.
La elección del tratamiento del molde depende de los materiales utilizados, los requisitos específicos de producción y las características deseadas de las suelas. La correcta aplicación de estos tratamientos superficiales puede prolongar considerablemente la vida útil de los moldes.
Algunos tratamientos para moldes:
Nitruración
La nitruración es un proceso termoquímico en el que la capa superficial de los moldes se enriquece con nitrógeno. Este proceso aumenta la dureza de la superficie y mejora la resistencia al desgaste y la corrosión.
Cromado
El cromado es un tratamiento de superficie en el que se deposita una capa de cromo en la superficie de los moldes. El cromado proporciona una superficie dura y resistente a la corrosión, lo que reduce el desgaste y alarga la vida útil de los moldes.
Chapado de titanio o nitruro de titanio
El chapado de titanio o el revestimiento con nitruro de titanio puede mejorar la resistencia al desgaste y la durabilidad de los moldes. Estos recubrimientos también proporcionan una superficie más lisa, lo que reduce la fricción durante el proceso de moldeo.
Carburación
La carburación es un proceso térmico que introduce carbono en la superficie de los moldes, aumentando su dureza.
Recubrimiento de carbono tipo diamante (DLC)
El recubrimiento DLC consiste en una fina capa de carbono amorfo, similar a la estructura del diamante. Este recubrimiento puede proporcionar una superficie extremadamente dura, reduciendo el desgaste y mejorando la resistencia química.
Pulido
Un buen pulido de la superficie del molde puede mejorar el acabado superficial de las suelas y reducir la fricción durante el proceso de extrusión o inyección.
Revestimientos antiadherentes
Como explica nuestro socio Claudio Arduini, de MPC en Urbino, estos revestimientos se aplican para facilitar la liberación del material moldeado y reducir la acumulación de residuos. Como tratamiento del molde, pueden aplicarse revestimientos antiadherentes, por ejemplo, de teflón o materiales similares.
Existen varios tipos:
- FEP: Alta antiadherencia, pensada para facilitar la extracción y reducir el uso de agentes desmoldeantes; temperatura de funcionamiento + 205°C en continuo.
- PTFE: Alta antiadherencia, excelente inercia química, destinada a facilitar la extracción y reducir el uso de agentes desmoldeantes; temperatura de funcionamiento + 260°C en continuo.
- Base reforzada + PTFE: Reforzado para aumentar la resistencia en condiciones de alta fricción, excelente inercia química, destinado a facilitar la extracción y reducir el uso de agentes desmoldeantes; temperatura de funcionamiento + 260°C en continuo.
- PFA: Alta antiadherencia, excelente inercia química, destinada a facilitar la extracción y reducir el uso de agentes desmoldeantes; temperatura de funcionamiento + 260°C en continuo.
- SOL-GEL: Alta antiadherencia, destinadas a facilitar la extracción y reducir el uso de agentes desmoldeantes; temperatura de funcionamiento + 350°C en continuo.
- Simplificación de los procesos de producción: Reducción del esfuerzo en el proceso de moldeo y desmoldeo: no es necesario insertar hojas de desmoldeo ni utilizar agentes desmoldeantes en cada ciclo.
- Aumentar la eficacia de la producción: Mayor velocidad de producción gracias a un proceso más corto y tiempos de ciclo reducidos.
- Superficies/espesores adaptables: El espesor indicativo estándar de los revestimientos es de 35 – 40 µ para adaptarse y no cambiar la estructura y el diseño del molde, pero al mismo tiempo es ajustable y puede aumentarse a petición del cliente.
- Ahorro de costes: Menos esfuerzo de limpieza, menos residuos y menos horas de trabajo
- Nunca más superficies irregulares: Sin película antiadherente que resbale ni cantidad incorrecta de agente antiadherente gracias a nuestros revestimientos.
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